Tras la Primera Guerra Mundial, el modelo democrático se impone en Europa. Sin embargo, en un territorio debilitado por una posguerra con una dimensión nunca vista antes, la extensión del fenómeno democrático no indicaba que el modelo estuviera afianzado. En la década siguiente surgen corrientes militaristas y antidemocráticas que cristalizarán en los movimientos fascistas y cuyo ascenso implicará un paso atrás en la persecución de la libertad.
Enlaces relacionados:
- Crisis económica en el período de entreguerras: el Crack de 1929.- La Primera Guerra Mundial: los Tratados de Paz y las consecuencias a largo plazo.
- Los totalitarismos hipernacionalistas: el fascismo italiano.
- Los totalitarismos hipernacionalistas: el nacionalsocialismo alemán.
LOS TOTALITARISMOS HIPERNACIONALISTAS
La década de los 30 del siglo XX verá el ascenso de los movimientos totalitarios, un fenómeno
que surge en un gran número de países al abrigo de la depresión económica y de
la sensación de frustración que deja un sistema democrático que no ha podido
impedir las crisis económicas ni las guerras y posguerras mundiales.
Benito Mussolini y Adolf Hitler durante la visita del primero a Munich (1940) Fuente: Wikimedia commons |
Entre los factores que favorecieron la crisis de los
sistemas democráticos de principios de siglo en gran parte del continente y el
extremismo y la radicalización de la política podemos destacar:
- La crisis económica de la posguerra, que trajo consigo una enorme inflación.
- Las tensiones sociales protagonizadas por una mayoría obrera y campesina (empobrecida y que había participado y sangrado en una guerra que no le reportaba nada).
- Los cambios en el sistema parlamentario, que permitieron una mayor representación social y la aparición de nuevos partidos de amplio seguimiento (socialistas, comunistas…) así como de grupos radicales de extrema derecha (apoyados por burgueses e integrantes de las clases medias).
- La llegada de la depresión económica de los 30, de amplias consecuencias a nivel mundial.
En este contexto, aparecen ideologías que propugnan la unidad del Estado aún a costa de la
libertad y defienden el bienestar del
colectivo, entendido como un ente único, por encima del individual. En
algunos casos, se convertirán en movimientos
de masas y llegarán a alcanzar el
poder imponiendo una idea unitaria del Estado en el que se condena todo
desviacionismo respecto al ideario propuesto por el movimiento. Se emplea para
ello, herramientas de control de la
sociedad como la propaganda, la censura y la represión. El movimiento
adquiere así con facilidad la forma de un partido único en torno a una figura carismática de poderes
ilimitados cuya presencia impregna todos los aspectos de la vida social. En
este sentido, el control de los medios de comunicación, la limitación de la
libertad de opinión y el empleo masivo de la propaganda se vuelven
fundamentales para afianzar la ideología en las masas.
El período de entreguerras,
subido por José María HerCal a https://www.youtube.com
De esta forma, se impone la dictadura y se asesina a la democracia aunque en la mayoría de los
casos no se rompe formalmente con ella; ya que el poder de sus líderes proviene
de la masa, no de la fuerza de las armas (los golpes de estado no son siempre
necesarios para imponer el nuevo régimen). El militarismo de la sociedad, el
empleo de la policía secreta, el fomento de la delación contra elementos
contrarios al régimen, el culto a la personalidad del líder, el imperialismo
exterior (usado como arma de propaganda), el control de la educación y el
empleo de símbolos y dogmas ideológicos se convertirán en herramientas
habituales para el control y manejo de la sociedad.
La imagen que el
régimen ofrece de sí mismo se convierte en un pilar esencial. Elementos como la
historia, la raza o la religión se
convierten en la columna vertebral de estos regímenes y actúan como símbolos de
unidad y de diferenciación respecto a otras naciones. Serán usados
sistemáticamente y reforzados, retorcidos y amoldados a las necesidades de la
nación. El hipernacionalismo
justificará así la pérdida de la libertad y los que disientan se convertirán en
enemigos del Estado.
Hitler y Mussolini a la llegada de éste a Munich (1938) Fuente: Wikimedia commons / Bundesarchiv, Bild 183-H12937 / CC BY-SA 3.0 |
CARACTERÍSTICAS DE LOS FASCISMOS
Entre las características que definen los movimientos
fascistas pueden destacarse que:
1. Es la reacción de un
nacionalismo contra la humillación de la derrota o, en el caso de los vencedores, contra el despilfarro de la victoria. Es por eso que el fascismo
encontró su medio de elección en el país vencido (caso alemán), pero también
tiene lugar en algunos de los países vencedores, que estiman que la victoria no
ha sido provechosa, que los sacrificios de los combatientes no han aportado
todo lo que se esperaba (caso italiano).
Los excombatientes
se consideran depositarios de una misión: procurar que el sacrificio de sus
camaradas y sus propios sufrimientos no hayan sido en vano. En los países
vencedores defienden el respeto de los tratados, la ejecución de las cláusulas,
y en los países vencidos encarnan el sentimiento nacional herido y humillado.
Los movimientos de excombatientes desembocarán fácilmente en la agitación
subversiva y serán un importante afluente del fascismo.
Hitler (sentado a la derecha) durante la I Guerra Mundial (1914) Fuente: Wikimedia commons / Bundesarchiv, Bild 146-1974-082-44 / CC BY-SA 3.0 |
El militarismo
impregnó todas las esferas de la sociedad. Las distintas asociaciones; ya
fueran laborales, juveniles, etc. adoptaban formas y valores inspirados en la
vida militar. La demostración del orgullo patrio se manifestaba a través de
desfiles que pretenden deslumbrar y del empleo de uniformes de temática militar
en organizaciones civiles. Se perseguía con esto reforzar la unidad e identidad
nacionales usando el nacionalismo extremo como arma política y originando
un ambiente de xenofobia e intolerancia.
2. Es una reacción
contra la democracia y la filosofía liberal.
Considera que la democracia es incapaz de defender los derechos e intereses del
país. Para ellos, es un régimen débil e impotente, que desacredita en el
exterior y traiciona en el interior. Además, tiene el defecto de dividir. En
lugar de hacer que todas las energías se unan en un objetivo común, la democracia
mantiene las divisiones. Por ello, la existencia de un único partido fomentaba
la unidad y fortalecía al Estado.
3. Es
antiindividualista. El individuo no
tiene derechos propios, no tiene más que los que la colectividad quiera
otorgarle. El individuo encuentra su razón de ser en la subordinación al grupo. El fascismo exalta los valores del grupo,
de la colectividad, de la comunidad nacional. El éxito del fascismo se debe, en
parte, a la voluntad de formar una sola alma, en la exaltación de sentir,
pensar, vivir y actuar juntos. Por ello, una de las primeras, medidas que
adoptan es suprimir todo lo que diferencia, el pluralismo, los partidos políticos
y sindicatos. La diversidad es sustituida por organizaciones unitarias, basadas
en la fidelidad al régimen y al partido.
4. Es antiliberal. Está en contra de todas las libertades que puedan
debilitar la autoridad y la cohesión del grupo nacional. Algunas de las
primeras medidas serán la instauración de la censura en las informaciones, el
control de las conversaciones, la vigilancia policial, todo ello acompañado,
de un conjunto de sanciones e internamientos arbitrarios. Algunos de estos
regímenes conservan un simulacro de asamblea representativa, pero que no
representa más que al partido en el poder: el Reichstag alemán o la Cámara
de los Fascios italiana. Pero estas asambleas no deliberan verdaderamente,
sino que sólo son cámaras de ratificación destinadas a dar publicidad a los
discursos de los jefes del régimen y aprobar las decisiones tomadas fuera de
ellas.
5. Es anticapitalista. Financieros y banqueros fueron considerados un símbolo
de la corrupción que asolaba a la nación. Para protegerla se llevaron a cabo
medidas de corte social como la creación de la seguridad social o de sindicatos
organizados desde el poder establecido como un medio de control social. Sin
embargo, cuando era necesario se recurría a la financiación que sólo las
organizaciones capitalistas podían aportar.
6. Su filosofía no es
igualitaria, sino una filosofía
elitista convencida de que una minoría de hombres está llamada a dirigir a los
demás. Son élites forjadas por el partido, dirigentes que se han distinguido
por su combatividad, su disciplina, su fidelidad hacia el jefe, su adhesión
total al partido.
Hitler junto a su primer gabinete (1933) Fuente: Wikimedia commons / Bundesarchiv, Bild 183-H28422 / CC BY-SA 3.0 |
La crisis de 1929 influyó en estos
movimientos aportándoles las masas que les faltaban. La crisis económica, al
sumir en la miseria y la angustia a millones de pequeños burgueses, empleados,
obreros, hace crecer los efectivos del partido y del electorado fascista.
7. Aunque en esencia
todos los movimientos fascistas son similares, algunos incorporan
características peculiares. Así, el
Nacionalsocialismo alemán añade un elemento nuevo, el racismo, que establece el
Postulado de la desigualdad de razas y afirma que las razas superiores deben
preservar su pureza biológica. Dentro de la jerarquía de razas, la prioridad
pertenece a la raza aria y la nación germánica que desciende de ella. Esta
teoría se convierte en una fe, en un dogma que inspira una política concreta,
que dicta una legislación que llevará al exterminio a 6 millones de judíos.
Esquema sobre las características básicas de los fascismos |
Los fascismos se convirtieron en un fenómeno muy
extendido y llegaron al poder en países europeos como Alemania, Italia, España,
Austria, Hungría, Rumanía, Bulgaria, o los estados balcánicos de Yugoslavia,
Albania y Grecia. Entre 1919 y 1936 hubo movimientos fascistas en casi todos
los países, pero no todos siguieron la misma suerte. Unos triunfaron, otros
fracasaron. Varios elementos pudieron influir en su éxito o fracaso:
- Las tradiciones intelectuales y políticas: en aquellos países en que el fascismo podía referirse a autores o escuelas que habían preparado el terreno, se encontraba una situación favorable para su expansión (caso alemán).
- La posición internacional de los países donde el sentimiento nacional ha sido herido por la derrota (Alemania) o por la manera poco considerada en que fue tratado por los aliados (Italia).
- Los trastornos sociales provocados por las crisis económicas: los éxitos de los fascismos son casi siempre proporcionales a la amplitud de las crisis.
- La gravedad del peligro comunista: cuanto más próximo esté el peligro comunista, mayor es la violencia de la reacción fascista. Sindicatos y partidos de izquierda fueron acosados y más tarde ilegalizados.
- Las dificultades de la democracia: cuanto mayores son las dificultades que encuentra el sistema democrático, más fuerte es el desarrollo del fascismo.
Esquema de las bases sobre las que se apoya la ideología fascista |
Los fascismos se convirtieron en un fenómeno muy extendido y llegaron al poder en países De esta forma, la década de los 30 será testigo de un enfrentamiento a tres bandas entre distintas ideologías: la comunista (triunfante en la URSS), la democrática (en sus horas más bajas) y la fascista (cuyo ascenso tendrá funestas consecuencias).
Estado Totalitario-Ciencias Políticas-Educatina,
subido por Educatina a https://www.youtube.com