lunes, 12 de agosto de 2013

La Revolución Francesa: La radicalización y la llegada de Bonaparte

El cambio más rápido y profundo que ha experimentado el modo de vida de la humanidad es el que se inició en Europa bajo el impacto de lo que algunos historiadores han denominado la "Doble Revolución", es decir, la revolución industrial que comenzó en Inglaterra y la revolución "política" iniciada en E.E.U.U. y Francia. Tras esta "Doble Revolución", Europa pasa de tener una sociedad anclada en características y valores casi medievales (Antiguo Régimen) a otra más moderna (Nuevo Régimen) que constituye el germen de la sociedad actual.

Enlaces relacionados:
El Antiguo Régimen.
La Revolución Francesa: La revuelta de los privilegiados y la Asamblea.
- La Revolución francesa: El dominio y ocaso de Napoleón.



 LA RADICALIZACIÓN REVOLUCIONARIA: LA CONVENCIÓN (1792-1794) 

Tras el intento de huida y posterior apresamiento del rey en Varennes, éste es considerado por muchos revolucionarios como un traidor a la patria. Su negativa a enviar más soldados para proteger Francia contra Austria y Prusia fue para muchos la gota que colmaba el vaso. El 10 de agosto de 1792 un levantamiento popular asaltó el palacio de las Tullerías, donde residía la familia real desde octubre de 1789, y convirtió la capital en una comuna defensiva. La familia real sería entonces juzgada y encarcelada. La Asamblea también se radicalizó y los jacobinos tomaron la iniciativa, procediendo a destituir al rey y a convocar una Convención Nacional elegida por sufragio universal.


Revista militar durante el imperio (1810), de Hippolyte Bellangé y Adrien Dauzats (1862),
(
con el palacio de las Tullerías al fondo)
Fuente: Wikimedia Commons / RMN / CC BY-SA 3.0

La Convención contaba con 749 diputados agrupados en 3 partidos:

  • La Gironda, defensora de la legalidad constitucional y de la libertad politica, se situaba a la derecha.
  • En el centro, la Llanura, moderada y vacilante.
  • A la izquierda, la Montaña, partidaria de medidas radicales y de la alianza con las clases populares.

En sus inicios dominaba la Gironda, y la Convención procedió a la abolición de la monarquía y a la proclamación de la República,  a la realización del proceso a Luis XVI y a su ejecución. Continuó la guerra con Austria y Prusia, en la que los ejércitos revolucionarios consiguieron la victoria de Valmy, éxito que se conti­nuó con la anexión de Saboya, Niza, Bélgica y la zona izquierda del Rhin, territorios conquistados a la Primera Coalición (Austria, Prusia, Gran Bretaña y Holanda) formada contra Francia.

Batalla de Valmy, de Jean-Baptiste Mauzaisse (1835)
Fuente: Wikimedia Commons
Pero en marzo de 1793, a la guerra con Europa se unió la rebelión contrarrevolucionaria de la región francesa de la Vendée. Ante el doble peligro, exterior e interior, la presión popu­lar forzó la adopción de medidas revolucionarias. La Montaña empezaba su dominio en la Convención, apoyada por los sans-culottes, es decir, por elementos radica­lizados del pueblo bajo a los que se denominaba así por su indumentaria.

Comenzaba así la fase del gobierno del Comité de Salvación Pública, de la acción de Robespierre y del Terror. La Convención elaboró la Constitución de 1793, pero la prioridad de lograr una victoria en las fronteras y la de aplastar la contrarrevolución en el interior impidieron la aplicación de esta Constitución, siendo sustituida por una dictadura temporal ejercida por el Comité de Salvación Pública.


Calendario republicano, de Philibert Louis Debucourt (1794)
Fuente: Wikimedia Commons / Bibliothèque Nationale de France

Una legislación de excepción alcanzó a los nobles, a los eclesiásticos, a los extranjeros y que abarcó también a los propios girondinos. Se sucedieron los encarcelamientos, procesos y ejecuciones. Para hacer frente a la situación económica se recurrió al requisamiento de todos los recursos materiales. En materia religiosa, se procedió al establecimiento de la libertad de culto, con el cierre de numerosos templos y la creación de un nuevo calendario revolucionario. Para enfrentarse a la guerra, el Comité de Salud Pública recurrió a la movilización o leva en masa, y a la ley de la Amalgama, que admitía la elección de oficiales por los soldados. Todas estas medidas dieron como resultado el triunfo sobre la contrarrevolución en la Vendée y nuevas victorias en el exterior.

Pero los problemas continuaban. Crecían las protestas por el encarecimiento de los precios y cundió la desunión en el propio Comité de Salud Pública. El 27 de julio de 1794 se produjo el golpe de estado de Termidor (julio), que llevó consigo el ajusticiamiento de Robespierre y de 21 de sus partidarios.

La burguesía moderada procedente de la Llanura dirigía ahora la Convención y trataba de volver a los principios de la primera fase de la revolución, elaborando la Constitución de 1795, según la cual el ejecutivo residía en un directorio de cinco miembros.



La Revolución Francesa,
subido por José Velásquez a https://www.youtube.com


 EL DIRECTORIO (1795-1799) 

El nuevo régimen intentó ser una república de orden apoyada en una base social reducida, la burguesía propietaria, que se oponía tanto a la monarquía y a la aristocracia como a la democracia popular y al jacobinismo. Pero los problemas económicos se mantenían, y la oposición política venía tanto de los jacobinos y de la Conjura de los Iguales de Babeuf, como de los realistas y de la rebelión resurgida en la Vendée, todas dominadas con la intervención del ejército.

Napoleón Bonaparte y el Consejo de los Quinientos en Saint-Claud,
de François Bouchot (1840)

Fuente: Wikimedia Commons
La burguesía francesa deseosa de estabilidad, se apoya en los generales, de los cuales el más prestigioso, tras sus campañas en Italia y Egipto, es Napoleón Bonaparte. Tras un verano catastrófico, con derrotas militares en el exterior y conspiraciones constantes en el interior, se produce el golpe de estado de Brumario (9 de noviem­bre de 1799), que coloca al frente del ejecutivo a tres cónsules: Bonaparte, Sieyes y Ducos. Se inicia así la carrera política de Bonaparte cuyas atribuciones son superio­res a los otros dos cónsules. Primer cónsul, consulado vitalicio e imperio serán los tres jalones que señalen la conversión de este hombre en la clave de una etapa de la historia europea.


Esquema-Guía sobre el desarrollo de la Revolución Francesa


Imperios - Napoleón (1-4) - Hacia el destino,
subido por ecnodocumentales a https://www.youtube.com


 NAPOLEÓN BONAPARTE (1799-1814) 

El Consulado adoptaría como base del régimen la igualdad civil, la defensa de la propiedad privada, el orden en el interior y la paz en el exterior. Estas eran ideas básicas de Napoleón, quien detestaba tanto el régimen feudal y aristocrático como la desigualdad civil y la democracia. Esta posición le aportaría un apoyo mayoritario y la reputación de ser el continuador y garante de la revolución.

Napoleón cruzando los Alpes, de Jacques-Louis David (1800)
Fuente: Wikimedia Commons / The Yorck Project
La Constitución de 1799 planteó la nueva reorganización del régimen y del Estado. La autoridad correspondía a tres cónsules de los cuales sólo el primero, Napoleón, ejercía el poder ejecutivo, que se extendía a la iniciativa y promulgación de las Ieyes, al nombramiento de altos cargos y a la destitución de los componentes del Consejo de Estado. Le asistían cuatro asambleas: el Consejo de Estado, el Senado, la Asamblea y el Tribunado. Organizó la Hacienda y las finanzas, con la creación de un gran número de funcionarios especializados y con la creación del Banco de Francia. Regularizó la enseñanza, concebida como servicio público, y reorganizó la justicia. Toda una seria de medidas perseguían esa tarea de pacificación y reconciliación: abrir las puertas al regreso de los emigrados y firmar el Concorda­to con la Santa Sede.

Respecto al exterior, Napoleón obtuvo la .victoria sobre la Segunda Coalición, al derrotar a Austria y hacer la paz con Inglaterra. Cuando en 1803, empezó de nuevo el conflicto entre Francia e Inglaterra, y a ello se sumó la reacción realista, se planteó la necesidad de reforzar el poder ejecutivo: Napoleón fue coronado emperador con el respaldo de un plebiscito y de la Constitución de 1804.

Batalla de Marengo (1802), de Louis François Lejeune
Fuente: Wikimedia Commons
El Código Civil, que garantizaba la libertad individual, la igualdad ante la ley, el carácter secular del Estado, la propiedad privada y establecía una regulación del comercio, se extendería por Europa a medida que la victoria y expansión napoleónica avanzaba. Pero este guerrear a través de un continente durante 11 años fue posible gracias a dos pilares: la política dictatorial y el apoyo del ejército.

La dictadura dejaba fuera de juego tanto a republicanos como realistas, y en general, a toda oposición, mediante el recurso a una policía todopoderosa, la forma­ción de tribunales especiales y una censura que afectaba a la prensa, al teatro y a los escritores.


Coronación de Napoleón y Josefina, de Jacques-Louis David (1805-07)
Fuente: Wikimedia Commons

Otro apoyo de fondo procedía del hecho de que, en el terreno económico, el período de 1804 a 1815 supuso una época de desarrollo en la que se inició un lento avance agrario y se potenció la industrialización con progresos claros en el sector tex­til. El proteccionismo, el fomento, las recompensas ofrecidas a los inventores de nuevas máquinas y la expansión militar respaldaban este desarrollo.

El segundo pilar imperial era el ejército, el gran favorito del régimen. Se trataba de un ejército nacional, con el servicio militar obligatorio, realizado a través de un reclutamiento por listas que lo hacía masivo, En él se ponía buen cuidado de mezclar nuevos reclutas con veteranos y en ofrecer ascensos por méritos de guerra, sin tener en cuenta la procedencia social del individuo.


Imperios - Napoleón (2/4) - Dominando la suerte,
subido por tecnodocumentales a https://www.youtube.com

Este ejército era ligero, en el sentido de que no cargaba con su aprovisionamiento, sino que realizaba éste por medio de requisas sobre el terreno. A lo largo de las campañas napoleónicas se pudo observar también una nueva estrategia, una nueva forma de hacer la guerra: concentración de las fuerzas en un punto, rapidez de maniobra realizando los movimientos durante la noche y formación de distintos cuerpos: uno pasivo destinado a resistir, otro activo que atacaba y una reserva que apoyaba cuando fuere necesario a cualquiera de los dos primeros.


La Europa napoleónica (1812)

Con esta organización militar, Francia logró un imperio que en 1812 había transformado por completo el mapa europeo. Este imperio comprendía:

  • Núcleo del imperio: Francia, Bélgica, Holanda, Roma y las Provincias Ilíricas.
  • Estados vasallos y protegidos: Confederación del Rhin, Reino de Westfalia, Gran Ducado de Varsovia, Confederación Helvética, Reino de Italia, Reino de Nápoles y Reino de España.
  • Estados aliados: Austria, Prusia, Dinamarca y Suecia.

Sin embargo, este imperio se mostró sumamente efímero: en 1813, la rebelión europea sería imparable hasta conseguir, en 1815, el hundimiento del imperio napoleónico.



Imperios - Napoleón (3/4) - La cumbre de la grandeza,
subido por Dios del Kaos a https://www.youtube.com